Hay momentos en los que hace falta "otra mirada" para ver la vida de otro color, hace falta un meterse hacia adentro. Eso mismo me ocurría cuando mis manos pintaron de rojo y negro esta madera.
miércoles, 15 de noviembre de 2006
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario